La jornada terminó con Pol Espargaró cruzando la meta en posición 12. Marc Márquez, que tuvo que abandonar temprano la carrera, está decidido a superar con paciencia todas las frustraciones que se interpongan en su recuperación.
La vida- y la competición- siguieron adelante, pero fue una jornada triste y difícil. Comenzó con 15 minutos de silencio y terminó sin festejos ni cava. Los pilotos se subieron a sus motos para cumplir con su deber.
No quedaba otra más que hacer de tripas corazón y pasar por la curva 9, donde el joven suizo de 19 años había sufrido el fatal accidente el día anterior. “Hoy nuestros resultados no son el foco, lo más importante es pensar en Jason y su familia. Hoy todos lo teníamos en nuestros corazones y mentes cuando corríamos”, dijo Pol. Los sentimientos de Marc eran similares: «Ha sido un fin de semana muy duro para MotoGP, hemos perdido un talento joven”.