Segunda semana consecutiva de MotoGP en el circuito Red Bull Ring austríaco. Los pilotos del Repsol Honda Team, Marc Márquez y Pol Espargaró, partían de la segunda y cuarta línea de la parrilla, respectivamente. Todo parecía apuntar hacia una carrera flag to flag protagonizada por la lluvia, aunque los pronósticos atmosféricos diferían en sus predicciones para el domingo. Al final, la intensa lluvia que hizo acto de presencia en las últimas vueltas de la carrera acabó truncando las aspiraciones del equipo.
Lloviese o no, la quinta posición obtenida por Márquez en la clasificación del sábado incrementaba sus probabilidades de victoria en este GP de Austria y lo cierto es que enseguida escaló posiciones. Las 25 primeras vueltas fueron todo un espectáculo a cargo de Márquez, Pecco Bagnaia (Ducati) y el actual líder del Mundial, Fabio Quartararo (Yamaha). A tres vueltas del final, el ocho veces campeón del mundo llegó a ponerse primero y parecía que este podría ser su primer triunfo desde el GP de Alemania el pasado junio. Sin embargo, la amenaza de lluvia se hizo real y los pilotos tuvieron que pasar por boxes para cambiar de neumáticos.