La carrera de este domingo en el GP de Brasil venía precedida por la polémica. El viernes, Lewis Hamilton (Mercedes) fue descalificado por irregularidades en el alerón trasero, mientras que el piloto de Red Bull, Max Verstappen, fue multado por tocar el monoplaza de Hamilton en parque cerrado. Así las cosas, partían décimo y segundo respectivamente. Max hizo una salida brillante y enseguida adelantó al compañero de Hamilton, Valtteri Bottas. Sergio Pérez, que salía cuarto, también consiguió rebasarlo y por un tiempo, ambos Red Bull lideraron la prueba.

Pero entonces Yuki Tsunoda, de la Scuderia AlphaTauri, se vio envuelto en una colisión que puso al Safety Car en pista, algo que no favoreció a los Red Bull. En la lucha por la primera posición, Max tuvo que defenderse de la presión de un Hamilton muy agresivo. Finalmente, el británico lo adelantó en la vuelta 59, pero su segundo lugar le permite conservar el liderato del Mundial con una ventaja de 14 puntos sobre el piloto de Mercedes. Sergio fue cuarto, mientras que el compañero de Yuki en AlphaTauri, Pierre Gasly, finalizó séptimo tras superar a los dos Alpine.

La competición no da tregua a los pilotos y la semana que viene se corre en Qatar. A falta de tres pruebas, los nervios están a flor de piel. El Mundial sigue en juego.

Con el Mundial de Moto GP ya decidido, el GP de Cheste, última prueba de la temporada, se perfilaba para los pilotos del equipo Repsol Honda, Marc Márquez y Pol Espargaró, como la ocasión de despedirse a lo grande ante la afición. Ambos habían ido progresando muy positivamente en las últimas carreras y en casa, solo podían hacerlo mejor. Pero Marc sufrió un accidente días antes del GP de Portugal del que, lamentablemente, no ha logrado recuperarse y el mismo Pol sufrió una grave caída en los entrenamientos del sábado que, aunque se quedó en un susto, obligó a su hospitalización y le impidió competir este domingo.

Por su parte, de los pilotos del equipo LCD Honda, el mejor clasificado fue Álex Márquez, que finalizó en decimotercera posición. Su compañero, el japonés Takaaki Nakagami, no tuvo tan buena suerte, pues se fue al suelo en la vuelta 23 y hubo de retirarse. Así pues, se quedó la afición española con las ganas y tendrá que esperar hasta el año que viene para volver a vibrar con estos magníficos pilotos. Será en el 6 de marzo en Qatar. Ya falta un día menos.