Cielos despejados y un sol abrasador reinaron sobre el Red Bull Ring. Marc Márquez defendió su posición de salida durante la primera vuelta y se fijó como objetivo asaltar las posiciones de puntuación.
Marc era el único piloto que corría con blanda en la trasera y fue capaz de ir ganando terreno hasta unirse a la batalla por los diez primeros en poco tiempo. A poco para el final, el de Cervera se situaba duodécimo, justo detrás de Bastianini y Morbidelli mientras mantenía su enfoque tranquilo y calculado. Manteniendo la posición hasta el final, Márquez pone fin a la desafortunada racha de abandonos.