Verstappen no dio tiempo a generar ninguna duda sobre quien es el rey de la categoría. El mismo sábado, tras una segunda posición en la carrera al Sprint, entrando por detrás de Piastri, sumó los puntos que necesitaba para proclamarse de nuevo Campeón del Mudo. Domingo, para festejarlo, dominó la carrera de principio a fin, aprovechando la “pole” y machacando a sus rivales con un dominio absoluto en una carrera que, según todos los pilotos, fue la más dura que han vivido en este campeonato, con un calor infernal a pesar de que la prueba fuera nocturna.
Su compañero de equipo Sergio Pérez, terminó en una meritoria décima posición, teniendo en cuenta que, por un incidente en la carrera al esprint, del día anterior, dejó inutilizado el coche y tuvo que correr con un vehículo nuevo. La salida del Safety Car le impidió calentar suficientemente los neumáticos duros limitando su progreso en carrera. Finalmente, con una décima posición, pudo sumar un punto que le acerca, paso a paso, al subcampeonato.