Los más destacados son el control de crucero adaptativo que ayuda a mantener una velocidad constante y a permanecer a una distancia segura del coche que circula delante acelerando y frenando. A su vez, cuenta con un sistema de mantenimiento de carril que utiliza la cámara frontal para detectar las marcas de la carretera y mantener el vehículo centrado con suaves ajustes automáticos en el volante.
Además, el sistema de ayuda de permanencia en carretera, al circular en velocidades superiores a 70 km/h, detecta si el automóvil se desvía y avisa de forma visual y sonora, a la vez que aplica la dirección automática para evitar el desvío y activa el frenado. Honda incorpora también el sistema de alerta de tráfico cruzado, el asistente en atascos y el sistema de información de ángulo muerto.
Por si todo esto fuera poco, los Honda CR-V disponen del avanzado sistema Honda SENSING 360, el siguiente nivel de seguridad avanzada con cámaras adicionales para anular los puntos muertos y reducir el riesgo de colisiones. Éste ofrece avisador de cambio de carril activo y de tráfico cruzado frontal, sistema de prevención y mitigación de impactos y de colisiones por cambio de carril.