mayo 17, 2017

Honda con la movilidad limpia: antes, ahora y siempre

El pasado 15 de mayo celebramos el Día Mundial de Acción del Clima. ¿Para qué sirve que haya un día con tal nombre? Sirve, por ejemplo, para recordar que el cambio climático nos afecta a todos. A todos los países, a todas las industrias, a todas las empresas, a todas las personas. Sirve también para recordar que la nuestra, la industria del automóvil, tiene y debe tener un papel clave en la lucha contra dos de los grandes retos de nuestros tiempos: la lucha contra el cambio climático y la mejora de la calidad del aire en nuestras ciudades. Dos luchas que, a la hora de entrar en acción, a menudo van de la mano.

La salud, lo primero

A principios de febrero la Comisión Europea dio un toque de atención a España por «superar los topes de contaminación atmosférica» en  Madrid y Barcelona. Y es que las medidas que las dos ciudades han estado adoptando últimamente no parecen estar atajando el problema. Los informes del Gobierno correspondientes a 2010-2014 revelan una superación constante de los niveles de dióxido de nitrógeno (NOX) establecidos por la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud.

No podemos olvidar que la contaminación del aire es una importante amenaza para la salud de los ciudadanos. En las grandes ciudades europeas, la baja calidad del aire se convierte en problema común, y se están estudiando medidas que cambiarán para siempre la industria de la automoción. Las propuestas van desde la identificación obligada de los vehículos con el etiquetado de la DGT según lo que contaminan, hasta descuentos en los impuestos para los vehículos menos contaminantes.

El pasado noviembre el Ayuntamiento de Barcelona ya aprobó el Programa de Medidas contra la Contaminación Atmosférica de Barcelona, que incluye 58 acciones directas para frenar la contaminación. Siguiendo la misma línea, el Área Metropolitana de Barcelona ha propuesto adelantar del año 2020 al 2018 algunas de las medidas de restricción del tráfico de los vehículos más contaminantes. A su tiempo, en Madrid, como en otras grandes ciudades europeas, la situación es semejante y el ayuntamiento también trabaja en propuestas para rebajar los niveles de contaminación en el aire

Todas estas medidas están enfocadas a conseguir que los núcleos urbanos ofrezcan una mejor calidad del aire y, por lo tanto, una mejor calidad de vida para sus habitantes.

Lucha de todos

Honda hace décadas que se posicionó al lado de las instituciones públicas y la ciudadanía en la batalla contra la contaminación. Un símbolo de este compromiso es el modelo original del mítico Honda Civic, lanzado en 1972, cuando la contaminación atmosférica amenazaba ya seriamente a las grandes ciudades norteamericanas y los ciudadanos reclamaban poder respirar aire limpio. Honda, que por entonces aún era una empresa relativamente pequeña, fue una de las pocas firmas que colaboró con las instituciones para encontrar soluciones al problema.

Honda Movilidad Limpia Honda Civic

Equipado con el primer motor CVCC, el Civic original llegó con una misión muy verde: demostrar a la industria del automóvil que la estricta normativa de la Agencia de Protección Medioambiental americana, que limitaba radicalmente el consumo de combustible, no sólo era posible de cumplir, sino muy necesaria para elevar los estándares del sector. En 1995, el Civic fue también el primer automóvil en cumplir con la estricta ley californiana de vehículos de bajas emisiones (LEV).

Menos humos, mejor movilidad

Desde el lanzamiento en 1999 del Honda Insight original, el primer híbrido comercializado en EE.UU. y en Europa, la compañía se ha dedicado a desarrollar soluciones de movilidad sostenible, como los motores híbridos, eléctricos y de pila de combustible de hidrógeno. Honda avanza así hacia su objetivo de ofrecer opciones de motorización limpia como alternativa en los diferentes segmentos de la gama.

Honda Movilidad Limpia Honda Insight

Sólo hay un camino a seguir: el que lleva a una movilidad más limpia, más sostenible, más sana y más humana. En otras palabras, combinar la eficiencia energética con el placer de conducir. Desde Honda trabajamos en esta línea, y un claro ejemplo de ello es el Honda Clarity Fuel Cell, con el que la compañía sigue avanzando hacia la electrificación para cumplir con los objetivos propuestos para 2025.