junio 5, 2019

Perfil de un genio: cómo ser un líder al ‘estilo Honda’

Los genios están dotados de un alma inquieta y una personalidad innovadora y disruptiva. Siguen visiones originales de lo que supone el éxito y disponen de una escala de valores casi indestructible. Soichiro Honda forma parte de esta selecta estirpe de inconformistas que se lanzaron en un apasionante viaje vital para cumplir sus sueños y cambiar el mundo.

El fundador de Honda entregó su vida a una infinita capacidad de innovación, una inagotable adaptabilidad al cambio, una toma inteligente de riesgos y un incesante impulso competitivo.

Prueba y error constante

Soichiro Honda, convencido autodidacta, creyó en la filosofía de probar, probar y probar, aprendiendo de los fallos para no repetirlos más: “Viendo hacia atrás mi trabajo, siento que no he cometido más que errores, una serie de fracasos, una serie de lamentaciones. Pero también me enorgullece lo logrado. A pesar de haber cometido un error tras otro, mis errores o fracasos nunca se debieron a la misma razón”. La tenacidad, la disciplina y la persistencia fueron sus señas de identidad y en el mundo de los negocios siempre estuvo abierto a nuevas experiencias que le permitieran evolucionar a nivel personal y empresarial. La palabra “parar” nunca tuvo que consultarla en el diccionario…  La inquietud por hacer cosas nuevas le persiguió hasta el final de sus días, hecho que le impulsó, por ejemplo, a aprender a pilotar helicópteros con 60 años.

Confianza indestructible en sí mismo

Nunca importó si las condiciones eran muy adversas o si el mercado incluso no existía. Soichiro Honda siempre fue hacia adelante con sus proyectos e ideas. Solo así se puede entender que una compañía que hace siete décadas acopló un motor auxiliar a una bicicleta sea actualmente una empresa líder en movilidad y la primera compañía del sector de la automoción en desarrollar íntegramente un avión privado a reacción (HondaJet) y el robot humanoide más avanzado del mundo (ASIMO).

 Pensar en grande

A base de sueños gigantescos, el fundador de Honda llegó muy lejos. Construyó su primer coche de carreras a los 18 años, empezó el primer negocio a los 22 y tras la Segunda Guerra Mundial abrió la fábrica Honda Technical Research Institute, en la que ideó el invento que le propulsó hacia el éxito (instaló el motor de una pequeña radio militar, que había recogido en casa de un amigo, en una bicicleta, construyó un depósito con una bolsa de agua caliente usada y lo llenó de aceite). El resto de la historia ya es sobradamente conocida…

No existen problemas solo hay retos

 Soichiro Honda no percibía muros infranqueables, veía la posibilidad de salirse airoso con un “aún más difícil todavía”. Solo de esta forma se entiende el optimismo con el que se enfrentó a retos empresariales gigantescos. Poco a poco, fue saltando todas las trabas que le salieron al paso para crear uno de los grandes imperios del motor.

Optimismo, innovación, confianza, pensar a lo grande y ganas constantes de aprender; la receta de Soichiro Honda para ser un genio. ¿Cuántos ingredientes tienes tú?