mayo 8, 2020

La movilidad tras la pandemia: más vehículos privados y más modelos verdes

En la nueva normalidad que estamos inaugurando, algunas cosas regresarán antes que otras, y algunos hábitos quizá cambien para siempre. Durante el confinamiento, la movilidad ha sido obviamente una de las grandes afectadas. ¿Cómo nos desplazaremos a partir de ahora? ¿Cuáles son los riesgos y las oportunidades de la movilidad en estos tiempos complejos?

El caos de la crisis sanitaria y social provocada por el brote de la Covid-19 es una oportunidad para la regeneración, la adaptación y el cambio. Nuestras maneras de movernos, y especialmente el volumen de desplazamientos, han cambiado radicalmente durante estas últimas semanas de excepción. Según el Observatorio de Conductores del Real Automóvil Club de España (RACE), hemos asistido a un descenso del tráfico de más del 80%, aunque muchos (un 70%) han seguido utilizando su automóvil de vez en cuando para hacer la compra, ir a trabajar o visitar a familiares mayores o dependientes.

Ahora que poco a poco empezamos a retomar nuestras vidas, es fundamental buscar maneras de reducir el riesgo de un nuevo repunte de contagios. Unos de los datos más significativos del último informe del RACE apunta, por ejemplo, que el 20% de conductores que utilizaban el transporte público tienen previsto cambiar y desplazarse en vehículos privados cuando se reincorporen. Es más, también un 25% de los que optaban por ir andando al trabajo tratarán de evitar la calle desplazándose en su automóvil para mayor seguridad.

Mi coche, mi tesoro

Al menos mientras los medios colectivos de transporte se adaptan a la nueva situación, es previsible que muchos consideren su coche, su moto o su bicicleta como las formas más seguras de desplazarse, ya que permiten evitar aglomeraciones y el contacto con desconocidos. La preferencia por los vehículos privados tras la crisis del Covid-19 ya se ha observado en otras regiones, como la ciudad china de Wuhan donde se originó la pandemia del nuevo coronavirus, y donde una parte importante de los ciudadanos que no tenían automóvil privado ha expresado su intención de comprarlo.

Además, esto también afecta a otras tendencias que ahora se perciben como arriesgadas, como el coche compartido, un sector que tendrá que adaptar rápidamente su modelo a las nuevas exigencias sanitarias. También están transformándose las gasolineras y áreas de servicio, que ya están poniendo al día sus instalaciones y sus protocolos de seguridad higiénica y de desinfección.

Concesionarios digitales hacia el futuro

La pandemia ha supuesto un duro golpe a la sanidad, la economía y la industria en todo el mundo. En España, el sector de la automoción, uno de los sectores de más peso en el PIB (10%) paralizó tanto la producción como la comercialización de vehículos en todo el territorio para dar pleno apoyo a las autoridades sanitarias durante el estado de alarma. La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) y la patronal de concesionarios Faconauto han empeorado sus previsiones de mercado para cierre de añoy creen que los dos trimestres posteriores al estado de alarma serán duros, aunque podrían mejorar a partir del verano.

¿Podrá la preferencia por la seguridad del vehículo privado impulsar las ventas y revertir los efectos devastadores del parón durante el estado de alarma?

En este sentido, en la reunión mantenida esta semana entre las asociaciones del sector del automóvil, el Gobierno español ha asegurado que impulsará medidas de estímulo a la demanda de vehículos «a corto y medio plazo» para favorecer la reactivación, con especial atención a fomentar opciones de movilidad eficiente y sostenible.

Acelerón de la movilidad verde

Teniendo en cuenta que la crisis de la Covid-19 está estrechamente relacionada con el impacto medioambiental de los seres humanos, muchas voces están llamando a aprovechar la crisis para acelerar la transición hacia una economía descaborbonizada más sostenible. Además, varios estudios han apuntado una correlación entre la contaminación atmosférica de las ciudades y un mayor índice de mortalidad del nuevo coronavirus.

El informe «7 priorities to help the global economy recover», publicado recientemente por la Energy Transitions Commission, una coalición mundial de dirigentes de los sectores de la energía, la industria, las finanzas y la sociedad civil, destaca la necesidad de «apoyar el sector automovilístico» en su esfuerzo por impulsar soluciones de movilidad ecológica.

La demanda, aunque claramente dañada por la crisis, también ha dado señales de transformación. Una encuesta de Venson Automotive Solution en Reino Unido, por ejemplo, ha revelado que hasta un 45% de los participantes está considerando que el próximo vehículo que compren sea un eléctrico tras ser testigos de la radical mejora de la calidad del aire durante el confinamiento.

Parece lógico concluir que esta confluencia de factores acelerará el desarrollo y la popularización de modelos de automóviles sostenibles, híbridos como el Honda CR-V Hybrid o el Jazz Hybrid, o eléctricos como el Honda e.