Noviembre 25, 2021

Sácale el máximo partido a tu coche eléctrico: cuida de su batería

Innovación

Para alargar la vida de la batería de nuestro vehículo híbrido o eléctrico no hay que estudiar ciencia aeroespacial. Al contrario, con un mínimo de cuidados muy sencillos, lograremos el máximo rendimiento. Los vehículos de combustión fósil tienen los días contados –la Unión Europea ya ha anunciado que en 2030 habrán dejado de circular por nuestras calles. No hay marcha atrás. Es un compromiso que Honda adquirió hace tiempo con su “Visión Eléctrica” y su apuesta temprana por los coches híbridos como el Jazz, el CR-V y el HR-V o ya totalmente eléctricos, como el Honda e.

Este tipo de vehículos, más inteligentes, eficientes y sostenibles han llegado para quedarse. No hay nada que temer. Nos acostumbraremos a ellos y pronto serán parte de nuestra cotidianidad. Si ya conducimos uno, hay ciertas cosas que debemos saber. Por ejemplo, cómo cuidar de la batería. Actualmente, el promedio de vida de una batería de litio es de entre 10 y 20 años. Que no es poco. Para que dure tanto como sea posible, hay ciertos factores que podemos controlar sin problema.

Cuidado con la temperatura

Tanto el frío como el calor en exceso pueden dañar gravemente la batería de un coche. Hay que tratar de evitar que el vehículo quede expuesto a los elementos y a las temperaturas extremas. Lo mejor es que duerma a cubierto, especialmente si va a estar un tiempo sin utilizarse. Además, en este último caso, hay que procurar que la batería esté a un 60% y no al 100%, dado que, si el vehículo se guarda con la batería totalmente cargada, esta se puede degradar más rápidamente.

Con cargar al 80% es más que suficiente

En el caso de los vehículos eléctricos, como el Honda e, no hace falta cargar la batería hasta el 100% de su capacidad como tampoco hace falta esperar a que se descargue por completo para poner el vehículo a recargar. Se recomienda mantener el nivel de carga entre el 20% y el 80%, ya que el calor generado durante el proceso de carga puede afectarla negativamente. Si acortamos dicho proceso, reducimos la posibilidad de sobrecalentamiento. ¿Y en los híbridos? No hace falta enchufarlos porque el motor se encarga de recargar la batería cuando está en funcionamiento. Dijimos que era pan comido, ¿no?

Evita las cargas rápidas en lo posible

Los cargadores de alta velocidad ahorran tiempo y nos pueden sacar de un apuro, pero no hay que abusar, pues el exceso de reacciones químicas y energía térmica que desencadena este tipo de carga repercute en la capacidad de la batería para recargarse. Sé previsor: pon el coche a cargar con antelación suficiente para no tener que hacerlo a la carrera. También es importante no dejar el vehículo enchufado cuando ya se ha completado la carga porque se acorta la vida de la batería. Aunque los cargadores dejen de transferir energía al alcanzar el 100%, es preferible desconectarlo.

Recargar mientras conducimos: la frenada regenerativa

La frenada regenerativa, básicamente, es un mecanismo que permite que el coche híbrido se cargue al desacelerar. Hay varias situaciones en las que este mecanismo entra en acción, cuando nos aproximamos a un semáforo en rojo o un stop, o al acercarnos a un paso de cebra y en las bajadas.

Las baterías han inundado nuestro mundo. Un pequeño recuento: la del teléfono móvil, la del ordenador portátil, la de los auriculares Bluetooth, la de la pulsera de actividad… y ahora también la del coche. Pero no solo nos han facilitado la vida de forma increíble, sino que, además, nos están ayudando a ser más amables con el medio ambiente y a colaborar en la urgente descarbonización de nuestra atmósfera. Si todavía no lo has hecho, no lo dudes más: hazle hueco a otra batería más y únete a la movilidad verde.